Blacklists

Este término es más utilizado en el ámbito del email marketing, las blacklists incluyen direcciones IP que suelen enviar spam.
De forma que los servicios de email, como Gmail, puedan clasificar sus envíos como tal.

¿Qué es Blacklists?

En español se le conocen como listas negras, suelen agrupar dominios, direcciones de correo electrónico y las direcciones IP que envían mensajes invasivos o spam.
Normalmente, también incluyen direcciones que no han solicitado el permiso del usuario para proceder con el envío.
Es por eso que las empresas que realizan envíos de newsletters deben contar con una gestión de permisos adecuada.

Origen de las Blacklists

Tienen su origen en la creación del protocolo RBL o Real-Time Blackhole List, fue un proyecto impulsado por Paul Vixie, el famoso creador de protocolos UNIX y otros software.
La operación trabajó bajo el nombre de MAPS, el acrónimo traducido significa Sistema de Prevención del Abuso de Envíos. Su finalidad era garantizar prácticas de email marketing más éticas y transparentes.

Más tarde, se popularizó el nombre “listas negras” para relacionarlas con la forma en que algunas organizaciones políticas y sociales discriminan a otros grupos.
Sin embargo, el avanzado sistema se denomina “libre” por lo que incluso se puede manipular para añadir IP\\’s de buena reputación.

¿Para qué sirven?

Su principal función es evitar la distribución masiva de spam, un dominio en listas negras podrá seguir realizando envíos, la diferencia radica en la bandeja de entrada, ya que todos sus emails llagarán a la bandeja de spam, evitando su entrada en la de promociones. Esto reduce considerablemente la tasa de apertura, lo que significa un rendimiento muy bajo en los resultados de estrategias de marketing.

Por otro lado, las Blacklists son grandes aliados para los usuarios, ya que permite proteger su privacidad y ofrece una buena experiencia de uso en los servicios de envíos, sitios web y plataformas en Internet en general.

¿Cómo funcionan?

Para ingresar un dominio en listas negras los usuarios pueden asignar la etiqueta spam, mientras más de estas asignaciones se apliquen a un email de ese dominio, más probabilidades tiene de ser incluido en blacklists.
Aparte, Gmail y el buscador Google utilizan un algoritmo que evalúa la calidad de esos mensajes, por lo que puede determinar cuándo un email es spam y cuándo no.

El proveedor de envíos va acumulando esta información, calificando al dominio según la cantidad de spam que recibe, al alcanzar el límite (la cantidad límite no es de conocimiento público) es posible que sea incluido en listas negras. Las listas de Google y Microsoft son privadas, pero también existen otras públicas, como las siguientes.

  • Fabel Spamsources.
  • Proyecto DrMX.
  • China Anti Spam Alianza.

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